Por Pedro Abad-Schuster
Regresó la casta a Sevilla. Estupendo encierro de El Pilar, que se fue sin ser toreado. Los toreros no tuvieron nada que ofrecer. Toros con un gran fondo de calidad y mucha nobleza; 4 toros más que aprovechables; los mejores: el 3ro, muy suave y dócil, y el 6to, manejable temperamental. Corrida justa de fuerzas. Desigualmente presentados. Algunos sospechosos de pitones.
Luis Francisco Esplá (de violeta y oro):
Ovación tributada tras el paseíllo. Muy tardía despedida en la Maestranza de Sevilla. Mínimo historial en Sevilla. Tratado con el respeto de su muy larga y en tiempos fructífera carrera. Lógicamente mermado de facultades. No banderilleó a ninguno. 1ro: Garbanzo negro, del hierro de Moisés Fraile, bonito, huyendo toda la lidia, evitaba provocaciones, noble por el izquierdo. Esplá no se metió con el toro, ni pudo retenerlo. Silencio. 4to: Duramente castigado en varas. Brusco en la muleta. Embestía con calidad y por debajo. Esplá nunca se decidió a torear de verdad. Estuvo quitándose y poniéndose. Silencio. Triste despedida.
Manuel Diaz El Cordobés (de esmeralda y oro): Actitud entregada y sincera. Digno profesional que sabe cumplir con su obligación. Estuvo debajo de un buen lote. Mató bien a sus toros. Insuficiente petición de una oreja de cada uno de un público festivo y alegre. 2do: Muy manejable, bravo en varas, de menos a más en la muleta. Manuel Diaz El Cordobés, voluntarioso y vulgar, falto de mando, sin acoplarse. Estocada tendida caída. Ovación general de la plaza entera, por el desparpajo, simpatía, gran voluntad. 5to: Toro de orejas. Sensacional en la muleta. Mansote con motor y progresivamente noble; responde de maravilla por el derecho. La obra careció de relieve y redondez, llena de altibajos. Se le fue el toro porque el torero tiene escasa calidad, pero lo dio todo. Estocada trasera. Ovación grande.
Javier Conde (de blanco y azabache): Un artista es otra cosa. Fatal. Se le escaparon sus dos toros. Nulo lidiador. Falto de valor. Despedido de Sevilla con bronca. Con los toros que le tocaron no era posible estar tan mal. 3ro: Docilísimo y de justas fuerzas; bondadosísimo. El torero no pudo confiarse con un toro así. Algunos muletazos despegado e inconexo. Media atravesada. Silencio. 6to: Uno de los toros bravos de la feria. Con temperamento y posible. El torero absolutamente incapaz de quedarse quieto con el capote. El toro que más pelea ha dado en el caballo. El picador Ignacio Rodríguez bien, pero luego se excedió en el castigo. Conde no se puso ni una sola vez delante del toro y no dejó ver la calidad del toro. Pinchazo hondo tendido huyendo, luego estocada alargando el brazo. Silencio.
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Regresó la casta a Sevilla. Estupendo encierro de El Pilar, que se fue sin ser toreado. Los toreros no tuvieron nada que ofrecer. Toros con un gran fondo de calidad y mucha nobleza; 4 toros más que aprovechables; los mejores: el 3ro, muy suave y dócil, y el 6to, manejable temperamental. Corrida justa de fuerzas. Desigualmente presentados. Algunos sospechosos de pitones.
Luis Francisco Esplá (de violeta y oro):
Ovación tributada tras el paseíllo. Muy tardía despedida en la Maestranza de Sevilla. Mínimo historial en Sevilla. Tratado con el respeto de su muy larga y en tiempos fructífera carrera. Lógicamente mermado de facultades. No banderilleó a ninguno. 1ro: Garbanzo negro, del hierro de Moisés Fraile, bonito, huyendo toda la lidia, evitaba provocaciones, noble por el izquierdo. Esplá no se metió con el toro, ni pudo retenerlo. Silencio. 4to: Duramente castigado en varas. Brusco en la muleta. Embestía con calidad y por debajo. Esplá nunca se decidió a torear de verdad. Estuvo quitándose y poniéndose. Silencio. Triste despedida.
Manuel Diaz El Cordobés (de esmeralda y oro): Actitud entregada y sincera. Digno profesional que sabe cumplir con su obligación. Estuvo debajo de un buen lote. Mató bien a sus toros. Insuficiente petición de una oreja de cada uno de un público festivo y alegre. 2do: Muy manejable, bravo en varas, de menos a más en la muleta. Manuel Diaz El Cordobés, voluntarioso y vulgar, falto de mando, sin acoplarse. Estocada tendida caída. Ovación general de la plaza entera, por el desparpajo, simpatía, gran voluntad. 5to: Toro de orejas. Sensacional en la muleta. Mansote con motor y progresivamente noble; responde de maravilla por el derecho. La obra careció de relieve y redondez, llena de altibajos. Se le fue el toro porque el torero tiene escasa calidad, pero lo dio todo. Estocada trasera. Ovación grande.
Javier Conde (de blanco y azabache): Un artista es otra cosa. Fatal. Se le escaparon sus dos toros. Nulo lidiador. Falto de valor. Despedido de Sevilla con bronca. Con los toros que le tocaron no era posible estar tan mal. 3ro: Docilísimo y de justas fuerzas; bondadosísimo. El torero no pudo confiarse con un toro así. Algunos muletazos despegado e inconexo. Media atravesada. Silencio. 6to: Uno de los toros bravos de la feria. Con temperamento y posible. El torero absolutamente incapaz de quedarse quieto con el capote. El toro que más pelea ha dado en el caballo. El picador Ignacio Rodríguez bien, pero luego se excedió en el castigo. Conde no se puso ni una sola vez delante del toro y no dejó ver la calidad del toro. Pinchazo hondo tendido huyendo, luego estocada alargando el brazo. Silencio.
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