viernes, 9 de mayo de 2008

El torero que regresó del exilio x Covadonga del Peso


.... José Pedro, quién te iba a decir a ti, con todo lo que has pasado, que finalmente Madrid no sólo te respetaría, sino que te dedicaría dos ovaciones como las que has escuchado hoy.

A ti, que algún que otro espectador madrileño ha llegado a nombrarte a la parienta pidiéndote que te dedicaras a vender aspirinas. Tú, que has tenido que soportar con profesionalidad y tesón el descrédito de cierto sector de Las Ventas y de algunos profesionales que dicen haberte descubierto ahora "porque ya no eres el mismo de antes". Después de unos cuantos años prácticamente exilidado en Francia, has vuelto a pisar con todas las consecuencias las primeras plazas españolas, anunciándote con las perlas del campo bravo - "Joyerito" de conciencia - en Sevilla, Zaragoza, Valencia, Pamplona y - como no - en Mont de Marsan, Arles, Nimes o Bayona.

Por todo ello - y aunque, para ser honestos, hay que reconocer que los toreros que más me llegan tienen un estilo bastante diferente al tuyo - hoy he vibrado con tus verónicas de recibo al cuarto, con tu salida hasta los medios al comienzo de faena en este toro y, por supuesto, con la estocada final. Con la espada, paisano, a día de hoy hay poquitos que te igualen...