Por Pedro Julio Jiménez Villaseñor de www.noticierotaurino.com
Desde México
EL SUEÑO no nos llegó, imposible digerir tan pronto la mala noticia de la muerte de José María Luévano, lo escribo y no lo creo, imagino el ataúd abrazando a un cuerpo inerte y frio, el de un amigo, el de un torero que tanto se parecía a don Fernando de los Reyes, “El Callao”, en lo físico y en esos llamados pellizcos de clase tan especial. Si yo hubiera cerrado los ojos, al abrirlos creo hubiera pensado que todo era una pesadilla, que malo, al no dormir ni esa esperanza de desvarío aspiro, la realidad es que es cierto, “El Negro” está muerto. Sin duda alguna, de estar parados a un lado del féretro y le formuláramos la pregunta sobre su manera de perder la vida, de seguro escucharíamos un irónico y rotundo… “No´ hombre, daría la vida por haberla perdido ante un toro”.
A ESTA hora los restos de José María están en el crematorio, todo ha terminado, su ciclo tenía marcado un lugar, una fecha y una hora, puntual llegó a la cita y desde hoy solo su recuerdo nos quedará, sus bajas verónicas, sus arrebatados remates, sus morenas facciones que en ratos eran de melancolía, con cierto acento de tristeza quedan presentes, la telaraña del destino se tejió y el torero se quedo atrapado… Su ciclo tenía lugar, fecha y hora, puntual llegó a la cita José María. Increíble que estando punto de retomar el vuelo, el regreso a los carteles de postín, el misterioso destino lo mando a volar a otro rumbo, esperamos en Dios sea a su lado. Existe una remota posibilidad de que en un cercano futuro las cenizas de José María estén en Aguascalientes para que la afición se despida de él en un merecido homenaje, la duda del viaje es que con seguridad su ahora viuda, doña Laura, querrá ser quien las transporte, quien las cuide, apapachar los restos de su marido pero ella acaba de dar a luz a su tercer hijo hace menos de una semana y el viaje debe de ser molesto.
Y PENSABA dar por terminada la triste nota, desgraciadamente debo de recordar algo muy feo, muy trágico, se trata, al parecer, de una cadenita que se ensaña con los toreros de vez en cuando. Gilberto Azcona, matador de toros de los años sesenta, falleció el pasado día 21, la muerte siempre se lleva a los taurinos en racimos, unos largos, otros cortos pero nunca de uno solo. Gilberto se hizo matador de manos de Manuel Capetillo, también fue un entrañable amigo de José Ramón Tirado puesto que ambos eran mazatlecos y en muchas tardes compartieron cartel. Cero y van dos, esperamos que La Catrina se largue muy lejos, que nos deje en paz por mucho tiempo.
HOY EN Puerto Vallarta torean, Alejandro Corona, Arturo Prado, Edgar Badillo y Ricardo Frausto con novillos de Santa Bárbara. El sábado en León, Guanajuato, se da la tercera corrida de su feria y anuncian la alternativa del de Guadalajara, Oliver Godoy, de manos de Julián López, “El Juli” y Arturo Macías de testigo con toros de Bernaldo de Quirós. El domingo en Guadalajara, Jalisco, se repite el pasado cartel de la plaza México, “El Pana”, Alejandro Talavante y Arturo Saldívar con 6 de Santa María de Xalpa. La cuarta corrida en León es con Rafael Ortega, Antonio Barrera, Ignacio Garibay y Joselito Adame con toros de San Isidro, En la plaza más grande del mundo, Xajay para El Zotoluco, El Juli y Octavio García, “El Payo”.
LOS PROBLEMAS, creo que mentales, del señor Rafael Herrerías continúan. Ahora se ha disgustado con Diego Ventura, vía su representante en México, Rubén Ortega, y a jurado y perjurado que el caballista luso-hispano no regresara a la presente temporada. Esto no creo le quite el sueño al caballista. Las corridas de aniversario, el 65, están en riesgo de caer a un tremendo hondo barranco de desprecio de parte de los aficionados. No entiende este caprichudo hombre que la fiesta no es de su propiedad, que está dándole en la madre, que acabara por contratar a los toreros que él supuestamente no quiere ver ni en pintura, al tiempo, el anuncio oficial de esas fechas no tarda, que recuerde lo de Francisco Quevedo… “Uno a uno, todos somos mortales; junto, somos eternos”. Más le vale alinearse por la derecha antes de que solo vea espaldas… Nos Vemos.