Zabala de la Serna tomó las declaraciones de Enrique Ponce sobre su no inclusión en los carteles de Madrid y la respueta fue: Me enteré por la prensa. Increíble. Pero mejor, lee y entérate de cómo van las cosas. (El Pais.com)
Enrique Ponce está que fuma en pipa, pero con la elegancia de siempre. Las declaraciones del empresario de Las Ventas le han encendido. José Antonio Martínez Uranga «Choperita» sostiene que Ponce se escuda en un recorte de honorarios para evitar decir que no quiere comparecer en San Isidro.
El maestro de Chiva, que faltará a la cita isidril por vez primera en 20 años, se siente ofendido: «No es verdad. Tuvimos una conversación en Fallas, a través de Ruiz Palomares, para mi contratación. Nos dijo, de entrada, que teníamos que rebajar el dinero, una exigencia que no compartimos porque no entendemos el motivo, la plaza está llena, sigue la televisión, los abonos suben, y quedamos en hablar estos días. Ya no ha habido tal llamada. Me he enterado por la prensa de mi ausencia en Madrid».
Enrique Ponce cree que Choperita le da la vuelta a la tortilla. «Para empezar -dice- me ha llamado el último. No es que yo no quiera ir, es que son ellos quienes no quieren que vaya. Tampoco ha habido un interés en que la negociación llegue a buen puerto. Intuyo que quieren justificar mi ausencia en Madrid y en otras de sus plazas. Nunca he tenido un problema con ningún empresario. Ni con Madrid ni con nadie. Hubo una primera conversación, y nunca más se supo. Su intención de contratarme ha sido mínima.
¿Que yo no quiero ir? Lo que no quiero es someterme a las condiciones que me plantean. Ya me ha pasado con ellos más veces. O buscan algo personal o no entiendo. Sus declaraciones reflejan muy poca clase. Se han justificado con sólo un contacto. Y no es por dinero, es por categoría, por respeto».
A Enrique Ponce le llamó la empresa de Madrid después de romperse las negociaciones con José Tomás. «De hecho -puntualiza- a mí me ofrecieron su corrida. Fíjese quiénes nos quedamos fuera de Madrid (JT, Aparicio, Cayetano, Ventura), los que ellos han querido. Eso dice mucho». Como en otras épocas, ahí está la plaza de Vistalegre, le sugerimos. No saldría mala miniferia. «No sé, no sé», se despide dolido después de dos décadas dando la cara en Las Ventas.
Enrique Ponce está que fuma en pipa, pero con la elegancia de siempre. Las declaraciones del empresario de Las Ventas le han encendido. José Antonio Martínez Uranga «Choperita» sostiene que Ponce se escuda en un recorte de honorarios para evitar decir que no quiere comparecer en San Isidro.
El maestro de Chiva, que faltará a la cita isidril por vez primera en 20 años, se siente ofendido: «No es verdad. Tuvimos una conversación en Fallas, a través de Ruiz Palomares, para mi contratación. Nos dijo, de entrada, que teníamos que rebajar el dinero, una exigencia que no compartimos porque no entendemos el motivo, la plaza está llena, sigue la televisión, los abonos suben, y quedamos en hablar estos días. Ya no ha habido tal llamada. Me he enterado por la prensa de mi ausencia en Madrid».
Enrique Ponce cree que Choperita le da la vuelta a la tortilla. «Para empezar -dice- me ha llamado el último. No es que yo no quiera ir, es que son ellos quienes no quieren que vaya. Tampoco ha habido un interés en que la negociación llegue a buen puerto. Intuyo que quieren justificar mi ausencia en Madrid y en otras de sus plazas. Nunca he tenido un problema con ningún empresario. Ni con Madrid ni con nadie. Hubo una primera conversación, y nunca más se supo. Su intención de contratarme ha sido mínima.
¿Que yo no quiero ir? Lo que no quiero es someterme a las condiciones que me plantean. Ya me ha pasado con ellos más veces. O buscan algo personal o no entiendo. Sus declaraciones reflejan muy poca clase. Se han justificado con sólo un contacto. Y no es por dinero, es por categoría, por respeto».
A Enrique Ponce le llamó la empresa de Madrid después de romperse las negociaciones con José Tomás. «De hecho -puntualiza- a mí me ofrecieron su corrida. Fíjese quiénes nos quedamos fuera de Madrid (JT, Aparicio, Cayetano, Ventura), los que ellos han querido. Eso dice mucho». Como en otras épocas, ahí está la plaza de Vistalegre, le sugerimos. No saldría mala miniferia. «No sé, no sé», se despide dolido después de dos décadas dando la cara en Las Ventas.
