Plaza de toros La Florecito en México, ayer. Novillada promocional en la que participó el peruano Iván Vela. Cerró el festejo el menudito torero peruano, Iván Vela, a quien le correspondió un extraordinario novillo que era de indulto. Le dio algunos muy buenos ayudados con temple y alargó la faena, escuchando un aviso. Al entrar a matar, el novillo lo prendió feamente y cayó de cabeza quedando conmocionado. Regresó al ruedo para otro aviso... En el festejo de ayer saltaron a la arena cuatro astados demasiado justos de presentación, pero a favor de la divisa de San Martín hay que señalar que estuvieron muy por encima de sus victimarios: fueron bravos y de calidad, con uno excelente que era para indultarlo. No se cortaron apéndices y en cambio hubo varios avisos y solamente una salida al tercio y los alternantes no se salvaron de ser volteados sin consecuencias que lamentar. (Esto)