Gijón, 8 de agosto de 2010. Diego Silveti ha estado rotundo hoy en Gijón. Ha logrado calar de manera significativa en los tendidos, creando momentos de gran emoción tanto con el capote como con la muleta.
El quinto fue un toro más parado, a pesar de lo cual el salmantino se metió en su terreno sacándole tandas de mérito y dejando ver que su cada vez mayor dominio de la técnica. Mató de estocada caída y le fue otorgada una oreja.
Diego Silveti recibió muy bien a la verónica a su primero, al que después quitó por ajustadísimas saltilleras que emocionaron al público. Comenzó la faena con cinco estatuarios en los que el novillo paso rozando y tras los que la música rompió a sonar de manera inevitable. Ya con la muleta en la derecha hilvanó tres tandas, dejándosela siempre puesta, para después con la izquierda propinarle al novillo dos tandas de naturales templados. Culminó con bernardinas, para matar después de estocada a su novillo, al que le cortó una merecida oreja.
Al sexto Silveti le construyó un buen quite por gaoneras que consiguió levantar al público de sus asientos. El novillo tuvo clase pero careció de fuerza por lo que el novillero se vio obligado a ajustarse a su lenta embestida. Silveti toreó despacio aprovechando al máximo el pitón izquierdo del novillo por donde lo llevó largo, echándose lo a la cadera, creando los mejores momentos de la tarde. Fueron tandas cadenciosas, pasándose al astado cerca, las que el mexicano creo en una faena que fue ganando en emoción y que culminó con cuatro sanjuaneras. Mato de dos pinchazos y estocada. Recibió una gran ovación.
Ficha del festejo. Gijón, domingo 8 de agosto. Novillos de José Cruz, de buen juego en general, destacando el excelente 2º. Media plaza. Francisco Pajares: silencio y silencio. Juan del Álamo: oreja y oreja. Diego Silveti: oreja y gran ovación.
Crónica del festejo. Francisco Pajares el comienzo de faena fue bueno, pero su primero aunque noble se paró en la tercera tanda por lo que poco pudo hacer el novillero. Mató de tres pinchazos y estocada. Silencio. El cuarto novillo fue reservón. Pajares ando voluntarioso y logró ligar varias tandas por el pitón derecho, pero al final el astado se rajó, dejando al novillero sin opciones. Mató de pinchazo y estocada. Silencio.Juan del Álamo se encontró ante un novillo bravo y repetidor, de gran clase y transmisión al que le construyó una gran faena basada en el pitón derecho. Del Álamo pudo con este buen ejemplar construir ligadas tandas, largas y de mano baja. Su faena fue premiada con una oreja.
El quinto fue un toro más parado, a pesar de lo cual el salmantino se metió en su terreno sacándole tandas de mérito y dejando ver que su cada vez mayor dominio de la técnica. Mató de estocada caída y le fue otorgada una oreja.
Diego Silveti recibió muy bien a la verónica a su primero, al que después quitó por ajustadísimas saltilleras que emocionaron al público. Comenzó la faena con cinco estatuarios en los que el novillo paso rozando y tras los que la música rompió a sonar de manera inevitable. Ya con la muleta en la derecha hilvanó tres tandas, dejándosela siempre puesta, para después con la izquierda propinarle al novillo dos tandas de naturales templados. Culminó con bernardinas, para matar después de estocada a su novillo, al que le cortó una merecida oreja.
Al sexto Silveti le construyó un buen quite por gaoneras que consiguió levantar al público de sus asientos. El novillo tuvo clase pero careció de fuerza por lo que el novillero se vio obligado a ajustarse a su lenta embestida. Silveti toreó despacio aprovechando al máximo el pitón izquierdo del novillo por donde lo llevó largo, echándose lo a la cadera, creando los mejores momentos de la tarde. Fueron tandas cadenciosas, pasándose al astado cerca, las que el mexicano creo en una faena que fue ganando en emoción y que culminó con cuatro sanjuaneras. Mato de dos pinchazos y estocada. Recibió una gran ovación.
Ficha del festejo. Gijón, domingo 8 de agosto. Novillos de José Cruz, de buen juego en general, destacando el excelente 2º. Media plaza. Francisco Pajares: silencio y silencio. Juan del Álamo: oreja y oreja. Diego Silveti: oreja y gran ovación.