Por Pedro Abad-.Schuster
Los toreros se han plantado ante el intento de pervertir la Fiesta Taurina en Venezuela. Las autoridades de la localidad costera de La Guaira, cercana a Caracas, intentaron obligar a los matadores a torear “a la portuguesa”. Los toreros se han negado a sentar un precedente que desvirtuara la fiesta en Venezuela y la corrida de la II Feria del Mar en La Guaira del domingo 29 de agosto 2010 ha quedado suspendida.
Los toreros que consensuaron una decisión ética, digna y honorable son el español Iker Cobo y los venezolanos Rafael Orellana, Leonardo Rivera, Reinaldo Polanco y el rejoneador José Luis Rodríguez. No aceptaron la violación del Reglamento Taurino, como sí ocurre en otras ciudades taurinas, cuando se logran “acuerdos” entre pseudo-empresarios, traficantes de toros de ganaderías no inscritas en la Unión de ganaderos de toros de lidia, toreros incluso extranjeros que viajan desde Europa a América y se venden por un puñado de monedas, y autoridades locales –bien vestidos, con carro de lujo en la puerta y secretarias muy bonitas- que pronuncian el célebre “dame la mía siquiera para el refresco”.
Las autoridades de La Guaira pretendían indultar a los toros, con divisas venezolanas de Los Marañones y El Rocío, sin haber ganado ese derecho en la plaza. La plaza portátil fue desmontada sin celebrar el espectáculo. Aún así, tanto toreros como ganaderos recibieron su paga (Fuente: ABC de España).