MUNDOTORO. Ese hombre que se rompe fácilmente. Esa personalidad quebradiza y frágil. Esa forma de regresar permanentemente al abrigo de la melancolía, de ausentarse mirando al gusano convertirse en mariposa. Ese valor sin gestos de valor, esa ostentación de nada. Todos esos eses y los que nacen de una tendencia natural a la negación del ruido y la tormenta, es Alejandro Talavante. El hombre que se rompe fácilmente encubre, mima, alienta y mece al torero que rompe a torear fácilmente. Con la delicadeza de la seda, la profundidad de los pozos sin fondo y con el vuelo raso de una muleta que llama, recoge, imanta y traslada la bravura hasta un poco más allá de los finales supuestos de los muletazos. Sólo desde los estados de inteligencia, cuando las claves de la fragilidad se juntan, se puede torear así: largo sin desponer el cuerpo, hondo sin descomponer la muleta. MAS
EL MUNDO.es Talavante se rompió al natural a cámara lenta. Absolutamente inspirado. Como dejándose llevar en una nube. 'Cervato', el toro de El Ventorrillo, de superior clase y son, que es el ritmo sostenido... La faena se desató de cánones en un cambio de mano después de torear ligado sobre la mano derecha. Alejandro sintió ahí el pulso. Aunque en la primera vez que citó se le vino el toro por dentro. Se libró de la cornada en el último instante. Y desde entonces fluyó todo con una muñeca que engrandecía el natural, cada uno muy lento. La plaza enloqueció literalmente. MAS
ABC.es La carrera de Talavante ha estado marcada siempre por la irregularidad: en lo positivo, aquella presentación de novillero en Madrid, aquel natural de Sevilla... En contraste, tardes opacas, cierto desmaño. En México ha incorporado a su repertorio algunas suertes de efecto seguro: cambios inesperados, arrucinas... He creído advertir, esta temporada, que su técnica ha progresado. De todos modos, algunos le acusan de que le beneficia el que le apodere la empresa de Las Ventas...La duda permanecía, creo, hasta hoy. MAS
LA RAZON.es Gloria de Talavante al natural... No sabría decir qué es. Imposible. Pero ocurre a todos, 24.000 personas casi por igual. Al instante. No, en un instante. Una décima de segundo para despegar un olé, para arrancarlo de la garganta más profunda, rota, quebrada, amargada en ocasiones.
Es la emoción. Emoción que explota por el arte, la belleza que se consume ante los ojos mientras nos llena, desborda. Nada existe, antes, durante... Y un rato después. El amor que se evapora. La historia que se consolida entre toro y torero. La de ayer fue un romance. Un romance de Madrid... MAS
TOROSDOS/BARUQUI. Otro lleno hasta la fila última de andanadas, con un público animoso y entusiasta en tarde nublada que abrió luz en una faena soberbia de un torero que, creo que ahora sí, se ha encontrado… Alejandro Talavante. MAS