El segundo fue de Cuvillo y no mejoró la tónica. Protestada por su presentación, pidiendo cambio. Apenas fue picado. Entre el viento y la poca fuerza sin entrega del toro, que iba a la defensiva, protestando los muletazos,aprentando, venciéndose, algo se vio por el izquierdo cuando se centró con él después de aguantar dos tarascones de los que casi sale herido. Un par mas por derecha y otra vez aguanta un intento de cogerlo. Deja la espada casi entera pero muy desprendida.