Fue operado ayer y hacia medianoche salía del quirófano de la plaza de toros de Huesca. La cogida se produjo al entrar a matar al sexto toro de la tarde. El parte médico habla de una «herida penetrante en el espacio presacro con orificio de entrada de ocho centímetros y de diez a doce centímetros de trayectoria parando en el hueso sacro. No afecta a órganos vitales ni arterias importantes».