Alfonso Simpson, accidentado ayer al torear el toro de su alternativa y pasar a la enfermería, luego de enterarse del diagnóstico que le impedía por prescripción médica salir a torear el 6º, porfió en volver al ruedo. Incluso, siendo él estudiante de medicina, se permitió sugerir analgésicos y formas de vendaje para salir a torear. Sucede que probó hacerlo en la enfermería de la plaza con el capote y fue entonces cuando se dio cuenta que no podía ni sostenerlo y aceptó lo que luego se anunció en la plaza. Simpson no salió a matar el 6º. Hoy en horas de la tarde será intervenido quirúrgicamente en la Clínica El Golf.