El Andi enloqueció desde la larga cambiada de inicio hasta el momento
de salir rebotado de la suerte suprema, mostrando evidente progreso
especialmente con los garapullos y enla muleta, manejada con mas pausa
y dejando detalles en el cierre de series como el broche amorantado.
Una pena que el becerro no ayudara, rajado y huidizo, impidió mayor
lucimiento y dejarnos ver un uso de la pañosa ligado. Nos gusto,
espero al otro de su lote.