La Razón- BARCELONA- Buena planta, don de palabra y contactos. El perfil del portavoz de la plataforma que promueve la abolición de la Fiesta en Cataluña, Prou (Basta), Leonardo Anselmi, respondería al de un político, si no fuese porque ha centrado su actividad en el campo de las ONG barcelonesas y el activismo en defensa de los animales. Sin embargo, Anselmi ha dejado de lado últimamente las protestas callejeras para pasearse por el Parlamento catalán enfudado en un traje a la última y con un ordenador portátil bajo el brazo.
Este argentino de Rosario llegado a Barcelona hace más de ocho años que se ha puesto el traje para ser la cara visible de los impulsores de la ILP destinada a acabar con las corridas de toros en Cataluña. Vegano confeso, milita en numerosas entidades animalistas catalanas e internacionales. Desconocido hasta hace pocos meses, Anselmi sorprendió a todo el mundo a la hora de ofrecer ruedas de prensa, que en más de una ocasión parecían mítines políticos. Es más, en los últimos meses Anselmi se ha prodigado por los medios de comunicación como pez en el agua. Esta actitud ha levantado muchas suspicacias entre sectores taurinos, que le acusan de ser un asalariado de los políticos de la izquierda verde. Unas acusaciones que la cara visible de los colectivos antitaurinos ha negado, pese a reconocer que ha colaborado en la redacción de parte del programario del eurodiputado de Iniciativa, Raúl Romeva. Es más, hay quien ve detrás de la actividad pública de Anselmi un complot para introducir y extender el veganismo «y su red económica» por tierras catalanas. Suyas son perlas como que la abolición de las corridas de todos «ya ha comenzado en todo el mundo»
Anselmi y otros miembros de las entidades animalistas en las que colabora han llegado a la conclusión de que «Cataluña es antitaurina». Y así comenzaron a organizar la iniciativa que ahora puede acabar con la celebración de esta tradicional Fiesta en Cataluña. Ellos repiten hasta la saciedad que su iniciativa no tiene ningún trasfondo político o nacionalista. Para muestra un botón, Anselmi no habla ni tan siquiera catalán. Sin embargo, algunos colectivos soberanistas se han subido al carro de la plataforma Prou para erradicar de Cataluña tradiciones que consideran «impuestas» por España. El grupo que apoya las tesis antitaurinas es muy heterogéneo, desde el Dalai Lama hasta la ex política Pilar Rahola.
Vinculados al sector público
Plataformas como Prou o la asociación Libera, que se encuentran detrás de la ILP contra la Fiesta, no reciben subvenciones de la Generalitat. Eso sí, han realizado tareas de asesoría para políticos y ayuntamientos catalanes. Aunque Anselmi mantiene su cargo como gerente de marketing de una empresa privada, la notoriedad que le ha dado ser el portavoz de la plataforma que promueve la ILP contra los toros parece haberle cambiado la vida. No en vano, afirma que ha tenido que pensar en su seguridad, ya que dice estar recibiendo amenazas de muerte desde el pasado mes de diciembre a través del correo electrónico. Internet es una de las herramientas que usa para defender la abolición de las corridas de toros.
Los promotores de la ILP entregaron 180.000 firmas al Parlamento catalán para prohibir los toros. Ahora los políticos tienen en su mano preservar la Fiesta.
Este argentino de Rosario llegado a Barcelona hace más de ocho años que se ha puesto el traje para ser la cara visible de los impulsores de la ILP destinada a acabar con las corridas de toros en Cataluña. Vegano confeso, milita en numerosas entidades animalistas catalanas e internacionales. Desconocido hasta hace pocos meses, Anselmi sorprendió a todo el mundo a la hora de ofrecer ruedas de prensa, que en más de una ocasión parecían mítines políticos. Es más, en los últimos meses Anselmi se ha prodigado por los medios de comunicación como pez en el agua. Esta actitud ha levantado muchas suspicacias entre sectores taurinos, que le acusan de ser un asalariado de los políticos de la izquierda verde. Unas acusaciones que la cara visible de los colectivos antitaurinos ha negado, pese a reconocer que ha colaborado en la redacción de parte del programario del eurodiputado de Iniciativa, Raúl Romeva. Es más, hay quien ve detrás de la actividad pública de Anselmi un complot para introducir y extender el veganismo «y su red económica» por tierras catalanas. Suyas son perlas como que la abolición de las corridas de todos «ya ha comenzado en todo el mundo»
Anselmi y otros miembros de las entidades animalistas en las que colabora han llegado a la conclusión de que «Cataluña es antitaurina». Y así comenzaron a organizar la iniciativa que ahora puede acabar con la celebración de esta tradicional Fiesta en Cataluña. Ellos repiten hasta la saciedad que su iniciativa no tiene ningún trasfondo político o nacionalista. Para muestra un botón, Anselmi no habla ni tan siquiera catalán. Sin embargo, algunos colectivos soberanistas se han subido al carro de la plataforma Prou para erradicar de Cataluña tradiciones que consideran «impuestas» por España. El grupo que apoya las tesis antitaurinas es muy heterogéneo, desde el Dalai Lama hasta la ex política Pilar Rahola.
Vinculados al sector público
Plataformas como Prou o la asociación Libera, que se encuentran detrás de la ILP contra la Fiesta, no reciben subvenciones de la Generalitat. Eso sí, han realizado tareas de asesoría para políticos y ayuntamientos catalanes. Aunque Anselmi mantiene su cargo como gerente de marketing de una empresa privada, la notoriedad que le ha dado ser el portavoz de la plataforma que promueve la ILP contra los toros parece haberle cambiado la vida. No en vano, afirma que ha tenido que pensar en su seguridad, ya que dice estar recibiendo amenazas de muerte desde el pasado mes de diciembre a través del correo electrónico. Internet es una de las herramientas que usa para defender la abolición de las corridas de toros.
Los promotores de la ILP entregaron 180.000 firmas al Parlamento catalán para prohibir los toros. Ahora los políticos tienen en su mano preservar la Fiesta.
