Por Pedro Julio Jiménez Villaseñor desde Aguascalientes
Con tres cuartos de entrada se reanudo el serial sanmarqueño, toros de Xajay que fueron pitados en cuanto a su presentación, desiguales en juego, al 5º se le dio arrastre lento.
FERNANDO OCHOA de berenjena y oro fue ovacionado en el que abrió plaza y en el cuarto cortó una oreja que bien pudieron ser dos de no haber sido molestado de continuo por fuertes ráfagas de viento y mostrar un poco mas de entrega. Brindó este toro a los médicos de plaza y el publico se puso de pie para tributarles un reconocimiento a su ya conocida exitosa labor al salvarle la vida a José Tomás apenas el pasado día 24.
Del segundo espada poco podemos decir que no se conozca ya, es Julián López, “El Juli”, un figurón del toreo universal que le pega pases al mismísimo diablo, se hace de ellos al segundo muletazo y si en su primero pasó desapercibido fue por el ya comentado inconveniente del aire que nos echo a perder los tres primeros toros de esta cuarta corrida, no así con su segundo que nos regalo lentas tandas de naturales, intercalando sabrosos adornos y sobre todo la inteligencia para cuidar a un burel carente de fuerza, la estocada fue de tres cuartos en el sitio correcto para que con eso se le entregaran las dos orejas y se alzara como el triunfador de la tarde.
Quien de plano pasó totalmente desapercibido fue “El Payo”. Y no solo hoy, sumo tres corridas en las que se le vio sin sitio e inclusive en la primera de ellas sin ganas, posiblemente adelanto su reaparición después de lo que le sucedió en su natal Querétaro y requiera mas campo, mas soledad para encontrarse y deberá de hacerlo, no es mal torero y no puede perderse, en Aguascalientes transitó muy en silencio. Tres tardes anunciado fueron muchas, lo expusieron demasiado.
Como decía al principio, el encierro fue indigno de una plaza como la Monumental Aguascalientes, el ganadero debe de tener más vergüenza y criterio para saber que es lo que le compran y para donde es, cierto, algunos, los menos estaban gorditos, con 100 kilos mas y año y medio mas de edad hubieran parecido toros de primera, Xajay ya entró al juego de Juan Pirulero... “quien los pague se los lleva primero”. Indigno por donde lo veamos, un triunfo con estas sabandijas se demerita enormidades.