Dice de él que “es sin duda la próxima figura del toreo”
El reconocido periodista taurino francés Vincent Bourg “Zocato” elogió el concepto del novillero peruano Joaquín Galdós a raíz de su triunfo en la novillada celebrada en la localidad francesa de Hagetmau el pasado Lunes 3 de agosto en la que cortó las dos orejas a su segundo novillo de La Quinta.
En su crónica “Zocato” señala que el limeño “ofreció una faena de alta técnica” y que “es sin duda la próxima figura del toreo”. Sobre su quehacer en el ruedo apuntó con su particular expresión que “su recepción con la muleta con el último novillo fue la prueba de su talento. El capote pegado al suelo, las verónicas con una fineza sorprendente darían inicio a una faena cien por ciento por la izquierda donde ni una sola vez la muleta fue enganchada. Los naturales se envolvían sin susurros de la tela, los pases de pecho prolongados cargaban la faena. Joaquín supo desplazarse siempre y supo además dejarle espacio al novillo para que pueda evolucionar aún más allá de sus impulsos a veces débiles. Más que una lección, fue una verdadera demostración del latino”.
Esa tarde Galdós alternó con Lilian Ferrari y Posada de Maravillas.
Texto completo de la crónica de Zocato en el diario Sud Ouest
Más allá de los ladronzuelos
Posada y Galdós triunfadores de la novillada con picadores.
Posada de Maravillas: Oreja y oreja. Lilian Ferrari: oreja y aplausos. Joaquín Galdós: ovación y dos orejas. Premio al mejor picador a Nicolas Bertoli.
Los seis novillos de La Quinta, bellamente presentados, astifinos y de pelaje gris manchado, pelaje típico de éste encaste, entusiasmaron a los aficionados. Para comenzar, por su auténtica bravura contra los picadores (16 picas en total) luego por su nobleza unánime, excepto el antepenúltimo que se defendía y frenaba corto.
En este lote espectacular, hubo además un novillo sensacional, lleno de cualidades. De nombre Coparroton , número 95 de la ganadería, quien mereció una vuelta al ruedo pero el trio presidencial de la plaza rechazó así como las dos orejas que solicitaba la afición para Lilian Ferrani, autor de una bella y rápida faena que terminó en un segunda estocada recibiendo.
Éste trio opositores de la fiesta, además intentó disminuir la moral de todos, controlando la música la mayor parte del tiempo. Muchas veces tocaban muy tarde o no tocaban, como con el novillo del peruano Joaquín Galdós, quien ofreció una faena de alta técnica. Galdós es sin duda la próxima figura del toreo. Su recepción con la muleta con el último novillo fue la prueba de su talento. El capote pegado al suelo, las verónicas con una fineza sorprendente darían inicio a una faena cien por ciento por la izquierda donde ni una sola vez la muleta fue enganchada. Los naturales se envolvían sin susurros de la tela, los pases de pecho prolongados cargaban la faena. Joaquín supo desplazarse siempre y supo además dejarle espacio al novillo para que pueda evolucionar aún más allá de sus impulsos a veces débiles. Más que una lección, fue una verdadera demostración del latino.
En cuanto a Posada de Maravillas, todo es chic, lánguido y elegante. Pero según nosotros, detrás de ese gesto no se encuentra nada emocionante ni profundo.
Bueno, fueron dos horas de placer taurino para saborearlo y recordarlo.
Más de la mitad de la plaza. 29°7 C. Las tormentas no estallaron, ellas también estuvieron cautivadas por esta tarde.
Traducción Carlos Musse
