Por Raúl Aramburu publicado hoy en Diario Expreso (extractos)
Este es un análisis personal sobre como interpreto los gustos de la afición de Acho. No pretende responder a ninguna ecuación económica, financiero ni de ninguna otra consideración para hacer posible que toreen en la feria. Solamente los que yo creo que gustarían en Lima, nada más.
Acho, por su abolengo, antigüedad e historia, tiene también sus características. Es actualmente una afición poco conocedora pero de mucha intuición y con una sensibilidad especial para todo lo que se estimule con la calidad, la estética y la belleza. Responde automáticamente al temple y la lentitud aunque no sabe bien el motivo. ¿Por qué? Porque conserva la perceptibilidad heredada en casi trescientos años de historia y también, en lo que se refiere al conocimiento, porque últimamente la juventud heredera se ha alejado un poco de la fiesta por un sinfín de atracciones modernas. Al menos, es mi explicación.
Ahora bien, la feria constará de cuatro corridas, es un hecho. Ello nos da doce puestos. De éstos, tres serian ocupados por toreros peruanos con alternativa y se barajan los nombres de mayor mérito: Fernando Roca Rey, Juan Carlos Cubas y Paco Céspedes, todos ellos con pergaminos para la feria.
El cuarto puesto peruano debe ser incuestionablemente para la alternativa de Alfonso Simpson. Si, como ofrecí al principio, dejo de lado las innegables ventajas económicas de este hecho, debo hacer hincapié en el atractivo que significa incorporar un nuevo torero a la plantilla nacional. Sucedió anteriormente y volverá a suceder: la gente quiere ver el triunfo del compatriota en competencia con los extranjeros. Si no, acuérdense de la expectativa creada con Cubas primero y Roca Rey después.
Nos quedan ocho puestos. El primero para Enrique Ponce que después del hito histórico del año pasado no tiene discusión alguna. De ahí en más pueden surgir discrepancias. Yo creo que hay quienes no pueden faltar. Por ejemplo José María Manzanares, por lo ya demostrado y su magnífico momento y porque creo que está signado para ocupar un lugar en las preferencias de Lima. En Sevilla estuvo sensacional. Y lo mismo digo de Miguel Ángel Perera, que es otro que tiene partidarios y acaba de reventar Sevilla y Madrid. Son dos nombres que cuajan perfecto en Acho. Muy bien. Ahora si nos ponemos a pensar en lo apegado que es el aficionado de Lima por lo dinástico, el nombre de Cayetano cae por su peso. Ya pasó con gloria por Las Ventas y creo firmemente que su empaque y hondura están hechos a la medida de Acho. Los recuerdos y su historia le dan aureola, algo que encanta en Lima. Si tiene suerte se meterá en el corazón de la afición, seguro. Para cerrar, doy mi voto por Morante de la Puebla, el distinto, el que ahora mismo es capaz – y nadie podrá discrepar – de remecer Acho con su arte ¿o no?
Listo, ahí está mi cartel: por el lado peruano Roca Rey, Cubas, Céspedes y Simpson; y por el lado extranjero Ponce, Manzanares, Perera, Cayetano y Morante. Salvo mejor parecer, obviamente. Y por si acaso quedan puestos para repetir a los triunfadores. ¿Se imaginan si Morante cuaja un toro, bien cuajado (que aquí aún no lo han visto), la expectativa que crearía en su repetición? Y así los otros. El próximo lunes: el fenómeno Tomás
N. de R. Faltarían 4 nombres toda vez que la empresa circula el rumor que los extranjeros vendrían a 1 tarde cada uno. Además, hicieron público que estarían esperando triunfadores de Madrid y otras ferias para convocar. Ya tienen uno: José Tomás. Triunfador y de leyenda.