jueves, 23 de febrero de 2012

Triunfo de Ochoa, importante Talavante, sin suerte Silveti en AUTLAN (fotos)


Lleno de "No hay billetes", hoy martes 21 de febrero, en la plaza de toros de Autlán de la Grana, donde Diego Silveti hizo su presentación como matador. Un escenario al que llegó dolorido y maltrecho debido a las lesiones que venía arrastrando de corridas anteriores y, muy especialmente, de la última toreada en Ambato apenas cuarenta y ocho horas antes. Sin embargo, la actitud de Silveti a lo largo de toda la tarde fue de entrega y enorme decisión, sin notársele la merma física. Por desgracia, no contó con un lote propicio para cortar las orejas. Más fortuna tuvieron sus compañeros de cartel, pues Fernando Ochoa paseó un total de tres trofeos, saliendo en hombros, y una Alejandro Talavante.

Se lidiaron cinco toros de Xajay, uno de regalo, otros dos de Montecristo, otro también de regalo, y uno de San José para abrir plaza. El resultado de los toreros fue el siguiente: Fernando Ochoa, silencio, oreja con protestas y dos orejas en el sobrero de regalo; Alejandro Talavante, silencio, oreja con aviso y ovación en el sobrero de regalo; y Diego Silveti, fuerte ovación y ovación. Un banderillero de Ochoa sufrió un fuerte golpe y fue trasladado a un hospital con perdida de conocimiento.

Diego Silveti tuvo en su mano las orejas del tercer toro de la tarde, pero, lamentablemente, después de una muy buena estocada el toro se agarró al piso de manera increíble, resistiéndose a morir. Por ese motivo, y cuando la labor con capote y muleta había merecido premio, Silveti tuvo que hacer uso del descabello. Tres golpes dieron al traste con el triunfo, aunque la afición le hizo saludar una fuerte ovación. Ese reconocimiento venía a premiar un gran saludo a la verónica, así como un ajustado quite por la espalda. Muleta en mano su labor tuvo altura y buen remante por los dos pitones. Siempre con torería y aplomo, primero enganchando al toro con más distancia, y luego, cuando vino a menos, más metido entre los pitones, todo lo que hizo llegó al público. Mucho menos juego dio su segundo, con el que solo pudo estar entregado y decidido, aunque en esta ocasión no estuvo acertado con los aceros de muerte.

Lo mejor de la actuación de Fernando Ochoa llegó con el sobrero de regalo de Montecristo, al que cuajó una completa faena que fue premiada con las dos orejas. Con el que abrió plaza, un muy buen toro de San José, construyó una entonada labor que fue silenciada. El segundo de su lote, de Xajay, se dejó y le cortó una oreja que, sin embargo, fue protestada por parte de la afición. Ochoa lo compensó todo con su buena labor ante el sobrero de regalo.

También regaló un toro de Xajay Alejandro Talavante, al que cuajó una buena faena en la que se mostró a buen nivel, lo que le pudo valer alguna oreja, pero no la remató bien con la espada. Lo mismo le ocurrió con su primero, con el que estuvo muy bien con la muleta, pero al que mató bajo. La oreja la paseó del segundo ejemplar de su lote, toro no fácil, con el que estuvo bien en una faena con momentos de toreo muy bueno.

Fotos Emilio Méndez