Efemérides de Acho y su feria: Y fue un 7 de octubre, en Lunes
Por Magaly Zapata
Y fue un Lunes 7 de octubre que Manuel Laureano Rodríguez Sánchez 'Manolete' pisó suelo limeño por segunda vez en su historia y la de nuestra ciudad. Venía para torear en la corrida inaugural de la primera Feria del Señor de los Milagros.
Corría el año 1946 y aquel día el califa cordobés llegó con los 30 años cumplidos el 7 de julio. Cuando pisó por vez primera suelo de Lima fue al descender de un avión Panagra en el aeropuerto de Limatambo y contaba con 29 años, fue también un día 7 pero de un jueves en el mes de marzo, y dos días después de lo anunciado.
Y como aquella primera vez, para Lima y los aficionados limeños su presencia revestía un aura de misterio y de mucha ilusión, por ver nuevamente al rey de los toreros y porque, el tiempo así lo demostró, su presencia en el cartel inaugural de nuestra feria nazarena marcaría el nivel y categoría que desde ese día y para la historia debía ostentar.
Esta fue su segunda visita a Lima en un solo año y no vino procedente de México sino que aterrizó en Limatambo en vuelo que lo trajo de Miami, Florida. Había llegado a ese país norteamericano directo de Barajas a New York a primero de octubre en viaje con su novia. "Manolete sale para América con la señorita Antonia Bronchano, Lupe Sino en el cine" decía la revista El Ruedo. Y con ella vino también a nuestra ciudad, llegaron en un Panamerican Airways que aterrizó a las 4.50 pm y al diestro también lo acompañaron de su apoderado 'Camará' y su mozo de espadas 'El Chimo'.
En el mismo semanario taurino español publicaron "Manolete salió el martes, 1 de octubre, para América, donde debe cumplir sus compromisos taurinos adquiridos el año anterior. La marcha del gran torero cordobés era lógico que despertase la expectación que siempre acompaña a las figuras populares. Pero, en este caso, la expectación aumentó porque durante la semana se ha discutido si Manolete se ha casado o no con la artista de cine Lupe Sino. ¿Si? ¿No? Lo cierto es que ella -señorita Antonia Bronchano- le acompaña en el viaje".
Manolete fue recibido en el aeropuerto por aficionados y amigos que ya tenía en la ciudad, y fue llevado al hotel Country de San Isidro. "Fue notorio que el largo viaje lo había fatigado y dejado huella, asimismo era evidente su encanecimiento y se le apreciaba avejentado" escribió Juan Elías Miletich en su libro Manolete en la Plaza de Toros de Lima.
En la noche improvisaría una conferencia de prensa y entre lo declarado por el monstruo del toreo, destacaría lo que dijo de esa temporada del 46 que fue una especie de año sabático español pues en su tierra solo toreó una corrida el 19 de setiembre y el resto se dedicó a vivir; en tanto que su temporada se sustentó en plazas de América taurina, contratos en México, Lima, Bogotá y Venezuela. "La única corrida que he toreado este año en España, la de Beneficencia donde corté dos orejas, no ha sido la mejor de mi vida, estuve bien, pero una faena igual el año anterior no me hubieran dado orejas, porque en esa época me exigían mucho, sobretodo en Madrid. Lo que pasó fue que hace tiempo no me veían".
Sin embargo Lima no fue ajena a la comidilla en España y también era la vida privada de la figura y su relación con la artista lo que despertaba curiosidad y ante alguna pregunta indiscreta, con la retranca y buen humor que dicen caracterizaba al gran torero comentó a los medios: "de casamiento por este momento no sé nada pero bien podría haberlo porque nadie está libre que le ocurra eso".
Esta es la forma en que empezamos a vivir desde aquí una larga 'Semana Grande' de nuestra feria limeña, con historias de su historia porque estamos ad portas de conmemorar-el próximo 12 de octubre- sus 78 años de vida, y si usted quiere le resta los interrumpidos por pandemia (2020-2021).