El primero de Ponce justito de fuerzas. Clase pero media embestida condicionado por la debilidad y lo sujeta con el temple y el pulso. Todo ello compuesto por la estética y plástica del valenciano. Sin fuerzas y cayéndose el espectáculo no está completo, el toreo surge a medias. Estocada casi entera. Oreja. Brindis al emérito.
El segundo de Manzanares tampoco está sobrado de fuerzas y el saludo capotero no es lucido. Hace el quite el peruano con tiento y pausas. Otro brindis al emérito. Faena otra vez condicionada por la endeblez del toro, evidencia justeza de casta. Clase sin fondo. El alicantino lo sujeta a media altura y el trasteo carece de intensidad. Mata de entera. Leve petición. Ovación.
Breve el saludo por verónicas de Roca Rey por la debilidad evidente del Martinete toro de su presentación en La Maestranza. Protestan. El juez lo mantiene. Otra vez la faena de enfermero. Temple y sutileza a media altura cuando lo cerró en responde lució más que abriéndolo. Con la zurda no mejora la canción. Blando y soso como el anterior. Intento, esfuerzo, ganas y maneras m, especialmente un par de naturales de cartel, pero sin toro imposible. Algunos pitos para que abrevie. Despacha bien. Saludos ovación
De mal en peor. El cuarto tambien rueda y con demora, no le queda otra al juez que cambiarlo. Sale el 4 bis del mismo hierro y no cambió nada. Soso y sin fuerzas Ponce a sujetarlo e intentarlo incluso entre pitones pero sin sentido. Lo sacan a saludar. No lo entiendo.
El quinto pareció tener más fuerzas por su pelea en el caballo. Roca Rey entro al quite por apretadas gaoneras al toro de Manzanares. En muleta llegó con más fondo y tuvo galope pero el trasteo no levanta vuelo a pesar del temple y los pases de pecho en redondo. No se acopló totalmente. No apretó el acelerador.
Media estocada. Saludos.
Llega el del cierre y este colorado parece con más fuerza. Se deja capotear por Roca Rey en lances a pies juntos y suaves y luego gallea al caballo y es aplaudido. Luego lo vuelve a colocar con la bamba del revés muy suavemente que provoca otra ovación. Llega a la muleta con sosería y lo trastea despacio y con temple sin afligir para que no caiga. Se luce pero no termina de romper por el toro. Acorta distancias y entre pitones el toro que no es tonto lo prende y se pasa largo rato en sujeto en la pala del cuerno agarrado y cae feamente golpeándose la cabeza. Se incorpora y sin lesiones termina de buena estocada y paseo el anillo ante el claro respeto del público que aplaude su lento andar.
Pasan los torero a saludar al Rey emérito. Al final, tarde de expectación y que con los crespos hechos nos quedamos. Le quedan dos tardes más al peruano.
