Duendes de la noche impidieron que pueda contar lo que vimos y vivimos en el festival taurino flamenco y benéfico celebrado la tarde-noche del Sábado 23 en el cortijo La Esperanza. El evento taurino estuvo flanqueado por un simpático show de música y danza afro-peruana y flamenca, al inicio, y por la música de la banda "Piratas Cojos" al final. Ambos fueron muy aplaudidos por el público asistente que no fue lo que el evento y el esfuerzo organizativo mereció.
Escaso público por tanto fue el marco en el que torearon los hermanos Roca Rey, Fernando y Andrés, con ganado del matador Aníbal Vásquez que no ofreció el juego necesario para que los asistentes vieran faenas importantes. Andrés Roca Rey pechó con su primero que no tuvo recorrido y se quedaba buscando al torero, aún así aguantó firme e intentó lucimiento. En el otro, aún cuando se vencía, por el izquierdo tuvo algo más de entrega que permitió ver los mejores muletazos de la noche, unos naturales profundos y templados del joven torero. Y en ambos, un toreo de capa con sabor. Meciendo las verónicas con donosura. El Andi cortó oreja de su segundo.
Fernando Roca Rey se mostró muy dispuesto y entregado en sus faenas. Mejor la primera, con un astado que le permitió estar algo más delante pero sin llegar a cotas de lucimiento porque era un novillo sin clase, que salía desentendido de la suerte. Cortó un trofeo. El último de la noche no fue mejor y aunque el torero estuvo porfiando la faena no remontó vuelo por lo que el doble trofeo se me antojó excesivo.
Los palitroques son capitulo aparte ya que ambos lo llevan en su repertorio. Vistosos tercios y muy jaleados por el público. Mas asentado Andrés en la suerte y Fernando, dominador y entregado. Dejo reseñado que ambos toreros salieron a hombros. Es de destacar el cante de Leo Amaya con la guitarra de Ernesto Hermoza. Fue una noche agradable, de variada oferta en espectáculos que sirvió como un abreboca ante la inminencia de nuestra Feria del Señor de los Milagros.
Fotos de Agustín Carbone