La plaza de toros Santa Margarita de Linares abrió sus puertas hoy para dos tardes en conmemoración por los 75 años de la muerte del mítico Califa del Toreo Manuel Laureano Rodríguez Sánchez MANOLETE a consecuencia de una cornada del toro Islero de Miura un 28 de agosto.
En el cartel de la corrida mixta de este sábado 27 de agosto estaba anunciado el peruano Roca Rey quien por el percance en Bilbao del jueves último no compareció aquí y me dicen que mañana tampoco en el mano a mano con su hermano en Ejea.
El caso es que ingresó en su lugar Morante de La Puebla y según me informé, apenas unas pocas localidades se devolvieron y la plaza lució a 3/4 de aforo, cómoda para ingresar y estar pero aún en la sombra los 36o pegan fuerte.
Tanto como el gazpacho que formó el rejoneador Diego Ventura especialmente en el segundo de su lote.
Hay que ver lo que torea con sus caballos, en una palabra: CONMOCIONA. Le imprime tanta intensidad y vibración a su toreo y suertes que pone al público de pie en atronadora ovación. Y no importa si el toro colabora mucho, poco o nada.
Su lote fue del hierro María Guiomar Cortés Moura, bastos, altos, sosos, con poca fuerza, poca fijeza y poca codicia en las grupas cuando de torear templando se trataba pero ahí estaba el jinete y sus caballos. Incluso arriesgando cuando le recortaban el viaje y se iban a los pechos de los equinos.
Aquellos con pique y rapidez para recibir a los toros de salida de toriles. Y los del espectáculo grande llegan en banderillas, ahí salen los más toreros, los que le llegan muy de cerca a la cara a los toros. Y para el rejón final también los especialistas en llegarle muy de cerca.
4 Orejas y rabo en premio a la excelsitud en la doma aplicada al toreo a caballo porque hogaño no se trata sólo de 'rejonear' sino de torear a caballo.
Y a fe que Ventura hoy lo hizo y en plenitud con sus caballos 'sueño' y 'guadiana' y también 'lio' pero con el que me quedo es el primero, vaya caballo bayo lusitano de 9 años, es el que más expresión torera tiene; con sus crines morenas largas sobre la cara, cómo lo hizo torear en su segundo, señores, se me antojaba como si uno de a pie citara con mentón hundido. Aguantando a ver si se arrancaba y cuando no, acortando distancias hasta entrar al terreno del toro parado en los medios y era en ese momento del embroque que 'sueño' toreaba a pedido de su jinete pero sin perderle cara y dejándosela vis a vis con el toro. Incluso quebrando su largo cuello mientras Ventura dejaba las banderillas, de una, cortas una tras otra. Con la gente delirando llega el clímax. Arroja la cabezada y a dos manos el par de palitroques, cabalgando para llegarle cerca el toro y 'sueño' toreando en libertad y a placer sin riendas y con ess tremenda expresión torera. Puso la plaza de pie. Un rejonazo certero y fulminante y cayeron dos y rabo. Otras dos le dieron en su primero con el que estuvo bien pero no a gusto, devolvió una. Honestidad se llama eso.
Los toros de Joaquín Núñez del Cuvillo no sirvieron, o para decirlo mas bonito, colaboraron poco (casi nada) con los de a pie que eran nada menos de Morante y Manzanares.
Y aquí se me antoja una reflexión. Entre Málaga y Linares he visto 10 de este hierro y me parece que la cuvillada del 2022 no está funcionando. Malos sin atenuantes aquellos, incluso uno le pegó el zarpazo a Fortes, rajándose, descastados y con poca fuerza, incluso se echó uno de Talavante. Y ahora más de lo mismo. Uno de Morante y otro de Manzanares se desplomaron. No tenían fuerzas y ¿qué sujeta la fuerza? La casta señores, la casta. Faltos o justos de casta.
Con ese mimbre debieron oficiar de titiriteros, sujetando las sogas para conseguir que surja el toreo.
A Morante le piden 2 le dan 1 en su primero que se empleó más largo por el izquierdo pero no por mucho tiempo y acortó distancias aguantando en el sitio para ligar y emocionar. Por la derecha fue más protestón y debió conjurar el calamocheo incómodo al final del muletazo. Remates gallistas y espada entera en el sitio. Si al primero lo lanceó con verónicas arrebujás y mecidas con el otro debió echar las manos altas en lo que parecen lances gallistas para aliviarlo de las caídas por la poca fuerza. Lo cuidó en el caballo pero no aguantó en la muleta, hizo el esfuerzo y ligó en un palmo el tiempo que pudo. Palmas y si dijo que vuelta no, para mañana.
Manzanares tuvo petición en su primero por la generosidad del público pero faltó toro porque se echó antes de la mitad de la faena el de Cuvillo aunque la espada fue desprendida y efectiva.
El ultimo fue el que mejor hechura tuvo y más alegre salida y rematando burladeros y así salió Manzanares a lancear por verónicas y chicuelinas con sabor. En muleta al toque dobló manos el toro y condicionó la faena, antes y en este abusó de pasarlo por el pico pero luego de las caídas se ajustó y tiró de raza para no irse de vacío y sin expresar. Cuajó con porfía y a media altura con mimo un par de tandas por cada mano y un esticonazo algo desprendido motivaron petición desatendida. Acaso pensó el del palco que no hubo suficiente argumento.
El caso es que otra vez la cuvillada no estuvo a la altura de sus circunstancias, como no lo estuvo en La Malagueta. Toros sin fuerzas y descastados, que se orientan o se echan. Mal asunto. Si se cae el toro se cae la fiesta.
Soy Magaly Zapata desde Linares. Nueva en esta feria por honrar la memoria y entrega del Califa Manolete. Y eso será mañana.
