lunes, 3 de junio de 2013

Esposa de Ponce, Paloma Cuevas: "desde que nacieron las niñas alguna vez sí se lo digo que se retire"

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A sus radiantes cuarenta años, Paloma Cuevas es una de las mujeres más elegantes de nuestro país, y también de las más envidiadas gracias al sólido matrimonio que forma con el torero Enrique Ponce, junto al que lleva ya diecisiete años de idílica relación, y cada día se muestran más enamorados. La revista Chance habló con ella en la inauguración de las muestra fotográfica en Las Ventas de Madrid "entre miedos y algodones", que esposas e hijos de los toreros hicieron en homenaje. Confiesa que ahora con dos niñas sí le pide al torero que se retire...

CHANCE: ¿Cómo te has sentido reviviendo tu infancia a través de esta exposición?

PALOMA CUEVAS: Ha sido muy bonito porque mi padre ha hecho faenas memorables en el ruedo de Las Ventas y ha sido emocionante poder pisar este ruedo que nunca lo había pisado, sólo había sido espectadora

CH: ¿Cómo los ha visto?

PC: Mirando hacia el tendido pienso en lo que deben sentir los toreros, esa responsabilidad, respeto y presión.

CH: ¿Has llegado a tener un capote entre las manos?

PC: Sí, fue lo primero que me pusieron nada más nacer en la mano, un capote y una muleta, porque mi padre quería tener un hijo torero y primero llegué yo (risas).

CH: ¿Revives también el miedo que tenías de pequeña?

PC: Tuve la suerte de que mi padre se retiró cuando se casó entonces sólo viví una etapa más de festivales benéficos, sin tantos compromisos profesionales. Fue una época en la que se disfrutaba más porque él estaba retirado

CH: ¿Con Enrique sí has pasado miedo?

PC: Sí, con él lo he vivido muy intensamente. Le conocí con 18 años y nos casamos con 22, eramos dos niños. He vivido todas las etapas de él, compartiendo más de 2.00 corridas, y su vida ha sido totalmente entregada a su profesión, con un sacrificio y un amor por el toreo inmenso.

CH: ¿Alguna vez le has pedido que se retire?

PC: Honestamente, nunca se lo había dicho porque respeto muchísimo su profesión y la vocación que tiene, pero desde que nacieron las niñas alguna vez sí se lo digo.

CH: ¿Al ser padres la cosa cambia?

PC: Sí porque antes era mi marido el que se jugaba la vida en la plaza pero ahora es mi marido y el padre de mis hijas, así que tengo que reconocer que alguna vez ya si le digo que hay que ir pensándolo porque las niñas me preocupan mucho

CH: ¿Lo pasan mal?

PC: La pequeña aún no pero la mayor ya se entera y sí es consciente aunque hemos intentado que no lo sea. Sabe que la profesión de su padre entraña un riesgo y cuando se va le pregunta, ¿cuando vuelves?, ven pronto, y él le dice cosas muy bonitas cuando se va a torear. La verdad es que me encantaría que se retire pronto pero respeto su profesión. Sé que el día que se retire será definitivo y quiere meditarlo mucho porque ha dedicado su vida por entero al toro y colgar el vestido de luces para toda tu vida cuesta. Está toreando menos pero para mi todavía es mucho.

CH: Aunque sea una al año lo pasas mal, ¿verdad?

PC: Exactamente. Él ha toreado durante diez años más de cien corridas de toros al año, ha hecho campañas americanas ininterrumpidamente y siente que ha reducido el número de festejos, pero para la familia todavía son muchos.

CH: ¿Cuál es el secreto de vuestro matrimonio?

PC: Nos conocimos muy jovencitos y hemos crecido juntos. Enrique es un hombre maravilloso que hace la vida muy sencilla a su lado, y es muy cariñoso. El único secreto es profesarnos un gran amor, un profundo respeto, y así va todo fenomenal siempre.

CH: ¿Cómo es Enrique?

PC: Enrique es un hombre maravilloso que atesora una calidad humana excepcional y el éxito ha dejado al descubierto más si cabe la gran calidad humana que tiene. Además, entre las muchas cualidades que tiene está el ser un yerno maravilloso que cuida de mi padre como si fuera suyo.

CH: Es un momento muy especial para Enrique porque además de ser un torero de éxito acaba de publicar su libro..

PC: Sí y a este le ha puesto especial dedicación porque son 24 años como matador de toros y es un libro completo en el que hace un recorrido muy profundo, desde que empieza hasta la actualidad. Quizás falta el capitulo de su retirada, pero ya está más próxima que al comienzo

CH: Cuenta con el prólogo de MarioVargas Llosa...

PC: Sí, Enrique le profesa una gran admiración y un profundo respeto, además tenemos el inmenso privilegio de contar con su amistad.