Olivenza (Badajoz), domingo 7 de marzo de 2009. 3ª de Feria. Matinal. Lleno. Toros de Zalduendo, el 3º como sobrero, terciados y descastados. Se dejaron en el último tercio, destacando 4º y 5º. Enrique Ponce, silencio tras dos avisos y dos orejas tras aviso. Alejandro Talavante, saludos tras petición y saludos tras tres avisos. Cayetano, oreja y palmas tras aviso. COPE
Qué injusticia, después de haber bordado el toreo al natural en el quinto toro, después de habernos recordado lo que es el toreo roto de cintura y profundo, cuando nos habíamos reconciliado con el toreo verdadero a fin de cuentas, Alejandro Talavante nos volvió a recordar que es un gran torero sin espada desgraciadamente. Cuántos triunfos lleva este chaval perdidos por no saber amarrar el triunfo con la suerte suprema. COPE
Un redondo y pletórico Talavante se ha pasado esta mañana por Olivenza marcando diferencias y repitiendo la historia contada mil y una vez con la espada. Se entretuvo en exceso Alejandro, después de cuajar al toro, no fue capaz de matarlo y se desesperó con el descabello, con el toro escondiendo la muerte y refugiado en tablas. Con lágrimas en los ojos recogió una atronadora ovación en el tercio. Una pena. BURLADERO
Qué injusticia, después de haber bordado el toreo al natural en el quinto toro, después de habernos recordado lo que es el toreo roto de cintura y profundo, cuando nos habíamos reconciliado con el toreo verdadero a fin de cuentas, Alejandro Talavante nos volvió a recordar que es un gran torero sin espada desgraciadamente. Cuántos triunfos lleva este chaval perdidos por no saber amarrar el triunfo con la suerte suprema. COPE
Un redondo y pletórico Talavante se ha pasado esta mañana por Olivenza marcando diferencias y repitiendo la historia contada mil y una vez con la espada. Se entretuvo en exceso Alejandro, después de cuajar al toro, no fue capaz de matarlo y se desesperó con el descabello, con el toro escondiendo la muerte y refugiado en tablas. Con lágrimas en los ojos recogió una atronadora ovación en el tercio. Una pena. BURLADERO