Angelo Fabricio Rojas Bonilla que se hace llamar "El Fabri" quiere ser torero.
Lo conocimos en enero pasado en la Feria de Jesús en Cajamarca cuando se nos acercó para contarnos de su ilusión pero en esta Feria de San Marcos, su tierra, el 22 de octubre es que lo vimos torear una becerra.
Ganas, entrega, valor y obvias carencias técnicas demostró pero sobretodo mucha intuición, "torerillo de testa" fácil manejo del capote y temple para torear con la muleta y así expresarse y hacer su toreo conectando pronto con los tendidos.
Hace mucho y bien para ser como es, y las nulas oportunidades qué hay aquí para forjarse. Es un aprendiz de becerrista que entrena en un mercado de abastos al lado del puesto de venta de su padre que es quien intenta entrenarlo y educarlo y que tiene que navegar en internet para hacerlo.
A los 7 años torea su primer becerro en un festival taurino en Jesús Cajamarca gracias al ganadero don Mario Andabak. Al año siguiente en Contumazá y hasta ayer que con la colaboración de amigos de su padre pudo costear su becerro de Viento Verde, pocas tientas incluidas.
"El Fabri" Pide la oportunidad de vivir su ilusión, de cumplir su sueño. Tiene muchas cualidades y capacidad. Quiere ser figura del toreo y sobre todo profeta en su tierra, nuestra tierra. Se nos viene otro torero importante para el PERÚ a menos que le demos importancia y oportunidad. Es tarea de todos apoyarlo.