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Enrique Ponce es la noticia de la semana porque no va a La México –el problema de abductores que casi lo saca de Lima- y porque acepta que en Sevilla tiene que estar. Sevilla y su feria de abril –que será en mayo– es un reto para el toreo, y para las figuras.
Pero ¿qué figuras quedan ante el plantón de los 5 (Juli, Morante, Manzanares, Perera, Talavante)? Entre los Top 15, figura y de época (José Tomás aparte) sólo Ponce que ya salió a decir “estoy por ir, otros años dije abiertamente no iba a Madrid ni a Sevilla. Este año no he dicho que no. Tenemos que hablar y vamos a hablar”.
La púrpura del toreo no sólo se carga apuntándote a ferias incluso de 2ª y 3ª, o con gestos o gestas, también se carga con guiños a la historia, y asumir como la obligación de estar donde se tiene que estar, dineros aparte. Y parece que Ponce lo asumió porque habló.
El reto de los 5 no sólo es a la empresa de Sevilla sino al toreo, a su historia, y parece que el de Chiva se aupa a la primera fila con el cetro en la mano para intentar poner el piso parejo. Entre tanto la empresa de Sevilla insiste: “La realidad pasa por bajar al menos un 30% los precios de las entradas, y eso necesita rebajar un 30% los costos”. Se queja que las figuras no arriesgan salirse del 1-2-3 por las ganaderías que piden que no ofrecen variedad al cartel y que parece le bajan los costos. Así están las cosas.
(publicado en lunes en el diario Expreso - Tauropolis)
