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(publicado esta semana en el del diario Expreso - Perú)
Me muero, Manzanares en Vogue dijo mi hija impactada al otear una reciente edición española, su biblia por estar en camino de profesionalizarse en esos afanes.
Sorprendida también veo al Cordobés (Benítez Jr.), Palomo hijo y Abellán. Todos posando de estudio con traje de luces.
Rebusco y el motivo era un reportaje especial para redescubrir a españoles su país alegre, de sol y pasión porque aunque esté mal, tiene arreglo dice la editora.
Por eso buscó al number one, el fotógrafo vivo más importante de todos los tiempos, dice ella por el peruano Mario Testino. Quien, entre fiesta y tradiciones, que así es España para él, posa su lente en los toros.
Porque su afición nació en Lima, los domingos de octubre le encantaba el colorido que allí veía, continuó por su amistad con Lacroix y vio toros en Arles (Fra), ciudad con luminosidad especial, y por su amor a Sevilla.
Dice que en los vogues siempre fotografió toreros, porque la tradición siempre es buena y para él, Manzanares además de tener valor en la plaza posee gentileza, una sonrisa y humildad muy lindas.
Peruano universal que con su arte no desperdicia ocasión de mostrar su amor por esta tradición ¡Chapó!