De las canteras del diestro Freddy Villafuerte, Chávarri emigró el año pasado y en enero de este año pudo ingresar a la escuela taurina de esa ciudad española.
Es así que fue seleccionado para torear su primer novillo y consiguió su primer gran triunfo tras volcarse con el corazón en la suerte suprema y dejar su sello desde el capote yéndose a porta gayola y manejando las telas con temple y buena colocación, lo más importante. Chávarri empieza a ser una realidad. Otro peruano que dará que hablar.
