#tientatime en San José del Monte. Vacas importantes que tuvieron delante baraja amplia de saber y oficio, sentimiento y emociones.
Desde la acrisolada torería de Bolivar, al temple de Rocío Romero, la delicadeza en las yemas de Alfonso para mecer las telas, la sobriedad de Tendero y la porfia entendida de Juan. El colofón de un Maestro y su oficio en Villafuerte.
Una tarde disfrutada tanto por lo hecho como por lo dicho. La ilusión de Cubas por confirmar en la cuna luego de pasar unos días por España; el decir de Luis que quiere torear como se cincela una obra, con aquel material que le permita expresar su sentir; la desazón cuando sientes que no se valora lo entregado… en suma, ARTE. Del que se expresa, del que se ejecuta, del que se siente. Bienaventurados los privilegiados al plasmar emociones en un lienzo de arena; y yo que vivo y revivo cada vez que puedo sentirlo, contarlo.
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