Parece que fue ayer cuando nos juntamos el día de tus 250 años, mi querida Señora. Y juntos, unidos, muchos aficionados celebramos contigo un día tan especial, para ti y para nosotros. Todo fue alegría bajo ese fulgurante sol que nos abrasó y que se convirtió en un emotivo convivio cuando cruzamos todos cuál cuadrillas de figuras, desde tu patio hasta el centro del ruedo, ese mismo que pisarán las leyendas del toreo, desde don Ángel Valdez "El Maestro", Belmonte, El Gallo (única plaza que pisó en América) y tantos otros que han escrito las páginas de tu historia en ese "tiesto tendido al Sol" como te decía Zeñó Manué, siempre tan enamorado de Lima y tí, plaza señera.
Allí en el centro de tus anillos te cantamos, emocionados el cumpleaños feliz, poesía, tu pasodoble, globos blancos y una alfombra de flores.
Tu eres el PERÚ taurino, emblema de nuestra tradición y de nuestra identidad. Porque has sido testigo fiel de la historia de nuestra patria desde que abriste las puertas a la expresión de nuestros pueblos.
Te erigieron por ser un punto elevado desde el cual se podía divisar el mar, a los pies del Apu tutelar de nuestra tres veces coronada Villa, a la vera del Río hablador. Sigues ahí enhiesta, hermosa. Grande.
Son 254 y como sucede en los últimos tiempos, amenazas existen de cerrarte, gente insensible que desprecia tu historia, que nos cohesiona como Nación. Pero no dudes que los buenos aficionados nos dejaremos el corazón por defender tu historia y nuestra tradición para que sigas por otros 254 años más siendo emblema de identidad también americana.
Feliz aniversario mi querida plaza de toros del Acho.
