Por Magaly Zapata
Y no podía ser de otra manera pues si pasamos al plano sensorial, que en el toreo es fundamental porque se instala en lo etéreo, en tal señalado día 7 de diciembre, regido por Júpiter aquel veterano planetario del sistema, acompañó el nacimiento del que con los años fuera la sociedad taurina más antigua de nuestro país, el Centro Taurino de Lima.
Hoy se cumplen 125 años desde que fuera fundado en 1899 por aficionados con solera obra que engendró don Francisco Espinoza Magán, llamado "El Padre de la Afición", fue su primer presidente acompañado por los señores: Antonio Garland, Juan Durán, Felipe Varela, Domingo Rey, Guillermo Romero, Pedro Larrañaga, Alberto Ayulo y Alberto Basombrío. Integraban El Centro personalidades como el que fuera presidente de la República don Augusto B. Leguía, Andrés Avelino Aramburú, Octavio Bernales, Guillermo Gastañeta, Carlos Hartung, José Antonio Aramburú, entre otros muchos más.
En aquella época conformaban una asociación de 234 miembros, contó en algún relato el recordado Martín Campos. Su razón, formar la afición a las corridas de toros y procurar el mejoramiento de estas. Por ello el fundador construyó una plaza de tientas ubicada en los alrededores del jirón Guzmán Blanco del distrito de Breña.
Sus referentes más cercanos son el Centro Taurino de Murcia, por delante, y el Cocherito de Bilbao a la saga. El pendón bicolor taurino sonó en Las Ventas, con su pasodoble del Centenario interpretado durante el paseíllo en la catedral del toreo, en la Corrida de Beneficencia del 2004, la más importante del calendario taurino español.
Campos nos ilustra sobre la época dorada que bajo la presidencia de don Rafael Puga Estrada, ganadero de Laguna Seca y padre del actual ganadero de Camponuevo y ex matador de toros Rafael Puga Castro, vivió el Centro. Los mayores recuerdan con cierta morriña esas fabulosas jornadas de tientas y almuerzos en La Hacienda Villa, al sur de Lima. Y yo recuerdo con cariño y admiración a dos emblemáticos miembros dedicados a la información, Raúl y Moisés, referentes cuando se trata de contar las historias de aquella época de oro.
CTL es decir Casa Iturry, casa de taurinos, donde cada tanto nos convocan, como hoy su Presidente Rafael Oliart para celebrar sus primeros 125 años.
Que la pasión no decaiga, que las celebraciones sean por todo lo alto y que por muchos cientos de años más se escuche ¡fuego! grito de guerra acuñado por Raúl de la Puente, al alzar la copa para brindar, de taurino a taurino. Salud Centro Taurino de Lima. Y aunque esta vez no puedo estar presente, desde la capital taurina del Perú, Cajamarca, y desde el corazón elevó el brindis, por los que no están y los que perviven con entusiasmo en engrandecer nuestra Tradición. Eternamente FUEGO.