Por Pedro Abad-Schuster (Foto: Carbone)
Llegó a México de Perú el novillero mexicano Diego Silveti, acompañado de su apoderado José María Garzón, para luego viajar a Quito, Ecuador en diciembre. Se le agolpan en la mente los momentos brillantes y emotivos que vivió el pasado domingo en el ruedo de la bicentenaria plaza de Acho, en Lima, Perú, al ponerse en marcha la tradicional Feria del Señor de los Milagros en la Plaza limeña de Acho.
“El novillo de La Ahumada con sangre española de Domecq fue emotivo, con mucha transmisión, que aguantó una faena larga, embistiendo con mucha fuerza, con recorrido, que repetía incansable por su bravura y buen estilo. Le di tandas largas que las asimiló todos. Considero que es la faena más emotiva que he hecho, muy variada desde los estatuarios, pasando por los muletazos sobre ambas manos y terminar con las bernardinas”.
En su primero saludó en el tercio, con gran ovación al canto, pues el novillo se apagó pronto y lo mató de media en buen sitio. En España le esperan algo así como 25 o 30 festejos y dependiendo del resultado se podrá pensar en la alternativa, de la que todavía no hay ni especulaciones. En México Diego solamente ha toreado dos festejos en Juriquilla (Querétaro), una con Hermoso de Mendoza y otra con Julián López El Juli (Fuente: Esto OEM).