Por Pedro Julio Jiménez Villaseñor
Uno de los pilares de la ganadería brava mexicana es esta casa de abolengo y solera, fundada en 1835 por don José Julio Barbabosa, en la hacienda de “Santín”, en Toluca, estado de México, con ganado criollo de la región.
Don José Julio Barbabosa Arzate, lidió por primera vez en Toluca, el 2 de septiembre de 1866 con cinco toros para la cuadrilla de Mariano González, “La Monja”, y se presentó en el Distrito Federal, en la plaza “Colón”, el 8 de mayo de 1887 con cinco toros para Diego Prieto, “Cuatro Dedos” y Juan Moreno, “El Americano”.
Al año siguiente, la ganadería pasó a manos de don José Julio Barbabosa Saldaña. En 1924 agregó 4 vacas y 2 sementales de Antonio Flores. En 1930, don Agustín Barbabosa tomó las riendas de la ganadería y, en 1931, adquirió vacas y sementales de “San Diego de los Padres”. En 1946, “Sonajero” fue premiado como el mejor novillo de esa temporada en la “Plaza México”. Desafortunadamente, en la corrida de la prensa celebrada en la “Monumental de Insurgentes” en 1947, el novillo “Ovaciones” le dio al sensacional José Laurentino López Rodríguez, “Joselillo” lo que a la postre fue una mortal cornada, en una tarde que se recuerda con tristeza.
Don Agustín falleció el 27 de julio de 1956 y legó la ganadería a su viuda y a sus nueve hijos, José, Celia, Carlos, Guadalupe, Guillermo, Margarita, Jesús, Antonio y Salvador. El 16 de octubre de 1960, en la Plaza México, después de que el público pedía el indulto para el novillo “Cordobés” y Pedro Jiménez, se tiró a matar, de cualquier manera se le dio vuelta al de “Santín”, en medio de una clamorosa ovación. En 1974 adquiere la totalidad de la ganadería doña Celia, y la traslada, en 1978, a donde ahora se encuentra. A partir de 1979, agregó varios sementales de “San Martín”.
Uno de los pilares de la ganadería brava mexicana es esta casa de abolengo y solera, fundada en 1835 por don José Julio Barbabosa, en la hacienda de “Santín”, en Toluca, estado de México, con ganado criollo de la región.
Don José Julio Barbabosa Arzate, lidió por primera vez en Toluca, el 2 de septiembre de 1866 con cinco toros para la cuadrilla de Mariano González, “La Monja”, y se presentó en el Distrito Federal, en la plaza “Colón”, el 8 de mayo de 1887 con cinco toros para Diego Prieto, “Cuatro Dedos” y Juan Moreno, “El Americano”.
Al año siguiente, la ganadería pasó a manos de don José Julio Barbabosa Saldaña. En 1924 agregó 4 vacas y 2 sementales de Antonio Flores. En 1930, don Agustín Barbabosa tomó las riendas de la ganadería y, en 1931, adquirió vacas y sementales de “San Diego de los Padres”. En 1946, “Sonajero” fue premiado como el mejor novillo de esa temporada en la “Plaza México”. Desafortunadamente, en la corrida de la prensa celebrada en la “Monumental de Insurgentes” en 1947, el novillo “Ovaciones” le dio al sensacional José Laurentino López Rodríguez, “Joselillo” lo que a la postre fue una mortal cornada, en una tarde que se recuerda con tristeza.
Don Agustín falleció el 27 de julio de 1956 y legó la ganadería a su viuda y a sus nueve hijos, José, Celia, Carlos, Guadalupe, Guillermo, Margarita, Jesús, Antonio y Salvador. El 16 de octubre de 1960, en la Plaza México, después de que el público pedía el indulto para el novillo “Cordobés” y Pedro Jiménez, se tiró a matar, de cualquier manera se le dio vuelta al de “Santín”, en medio de una clamorosa ovación. En 1974 adquiere la totalidad de la ganadería doña Celia, y la traslada, en 1978, a donde ahora se encuentra. A partir de 1979, agregó varios sementales de “San Martín”.
APUNTE: Los Santín de doña Celia Barbabosa se lidiaron en una corrida de la Feria de Chota del año 2000, uno de los toreros anunciados en ese cartel fue el diestro mexicano Antonio Urrutia quien además recibió una cornada en la pierna y al terminar la lidia de su astado fue trasladado al hospital para ser atendido. Como anecdota debo contar que el hecho que llegaran toros mexicanos con abolengo y se enviaran para ser lidiados en la segunda plaza en importancia del país hizo que viajara por vez primera a ver toros en las provincias del Perú. Y para entonces, desde Chota y en tiempo real, por primera vez también, salió al mundo la primera reseña y crónica taurina a través del entonces casi único medio de Internet, Burladero.com (el original) que dirigía el periodista español Miguel Angel Moncholi.